Días de soledad
Ultimamente disfruto de muchos momentos de soledad.
Me siento más cómodo que antes en estas situaciones. Estoy redescubriendo el placer de moverme por la ciudad a mi antojo, sin dar explicaciones, comprando donde quiero, pasando cinco minutos parado delante de un escaparate o recorriendo el centro con mi mp3 a todo volumen mientras me fijo en la gente que pasa a mi alrededor. Las conversaciones hasta las tantas con amigos tras una jarra de cerveza, escuchando, opinando, dando consejos o recibiéndolos según la mejor ciencia de cada uno y de sus propias experiencias, los paseos con mi perra por el paseo marítimo, las horas muertas o simplemente quedarme un viernes por la noche echando una partida al Cod4 sin sentir que estoy perdiendo el tiempo. El placer de hacer lo que te apetece en cada momento.
Y ahora me apetece hacer cosas. Me apetece ponerme en forma -pero de la buena- y mejorar -y mucho habrá que mejorar- en inglés y algún otro idioma. Me apetece reencontrarme con viejos amigos de los que hace casi ocho años que no se nada (omg!) pero que, casualidades de la vida, he visto hace poco (el destino, dicen que te da en cada momento lo que necesitas).
Los días pasan y, tienen razón, el tiempo todo lo cambia.
El Cajón de Bronch v2.0 
Parece como si el destino supiese lo que necesitas en cada momento y te lo da. Sin ir más lejos, hace un ratín andaba un poco de bajón y me pasaron, sin saber nadie q estoy así, una cancion que anima bastante. Casualidades…
Un abrazo y a disfrutar de lo q te apetezca 😉
Un abrazo lo primero colega. Sí, es raro como van viniendo las cosas, de vez en cuando, pocas veces -menos mal- y cuando menos lo esperas y crees que todo está en su sitio, que está bajo un orden y como un necio llevas tiempo convencido de que eres tú y solo tú quien controla tu vida, justo en ese momento, llega el destino, dios, la vida o como quieras llamarlo y sacude con fuerza tu espacio y tu mundo y te encuentras levantandote magullado y mirando alrededor sin saber muy bien qué es lo que ha pasado y qué puedes hacer para recolocar tu mundo.
[Achtung!: Teclado italiano]
Ey Bronch! [O deberìa decir Roger?] Juer, no sè que te ha pasado pero parece un buen golpe… De todos modos se te lee tranquilo asì que, sea lo que sea, aplica viejo remedio: camina, camina despacito pero camina, oh tiempo! Y el mundo va y se recoloca.
Un abrazo desde el aburrido y tòpico trabajo de un mileurista en pràcticas.
Yo disfruto de la comodidad de mi soledad frente a páginas guarras xDDD